No ha durado mucho la incursión
de Microsoft en el mundo de los teléfonos móviles y eso que hace apenas
un par de años la compañía había comprado Nokia
para tratar de hacerse un hueco en este sector tecnológico. ¿Y cómo está la
cosa ahora mismo? Pues todo parece indicar que va a ser muy complicado que en el futuro veamos nuevos modelos de
smartphones de Microsoft. Así de duro.
Microsoft vende sus derechos de telefonía
¿Y qué nos lleva a pensar todo
esto? Pues las señales están muy claras, a mediados del mes pasado el gigante
informático se deshizo de la propiedad
intelectual de Nokia y se la vendió a HMD
global, una empresa que fabrica teléfonos y tablets basados en Android.
Esto sin duda supuso un fuerte golpe a la división, pero poco después FIH Mobile anunciaba que había comprado
por 350 millones de dólares la sección de smartphones básicos de Microsoft.
Parece ser un intento por parte
de HMD global y FIH Mobile de resucitar la marca Nokia, después de
que Microsoft haya conseguido lo
impensable: convertir un teléfono clásico e icónico en algo poco rentable. ¿Lo
conseguirán?
Pérdidas inasumibles
Por desgracia, las consecuencias
no van a quedarse ahí, ya que Microsoft
ha anunciado pérdidas cercanas a los 1.000 millones de dólares para este
año que provocará el despido de casi
2000 empleados de su división de
móviles, a las que hay que sumar otros 7.500
millones y casi 8.000 puestos de trabajo perdidos el año pasado. Un
auténtico desastre de gestión.
Según Terry Myerson, uno de los responsables de Microsoft y Windows, la compañía quiere centrarse en productos relacionados con la seguridad de
la telefonía, así como servicios
específicos para empresa como gestión remota.
Por lo tanto, parece que no habrá más teléfonos Lumia en el futuro
y en el horizonte queda en duda si finalmente saldrá el Surface para 2017. Ni los más optimistas lo esperan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario